Qué nos deparará el Mundial de ciclismo del próximo domingo 29 de septiembre de 2024? La prueba de fondo en carretera que va a reunir una constelación de estrellas en un trazado verdaderamente exquisito y exigente para ratificar al que consiga ser el ganador de la prueba.
Veamos las opciones y las posibilidades de unos y de otros de cara a esta prueba del próximo domingo, que va a reunir una constelación de estrellas y, sobre todo, nos va a traer el duelo más esperado, que es aquel que va a enfrentar a Tadej Pogačar y Remco Evenepoel.
El recorrido Suizo
A las 10:30 horas, el pelotón de la categoría élite masculina partirá desde Zúrich, cruzando Buch am Irchel y subiendo los puertos de Kyburg (1,2 kilómetros al 12%) y Binz (4,6 kilómetros al 4,5%). Luego, entrarán en el exigente circuito que definirá la carrera, en el que los ciclistas tendrán que completar siete vueltas. En cada una de estas vueltas, enfrentarán las ascensiones de Zürichbergstrasse (1,1 kilómetros al 8%) y Witikon (2,3 kilómetros al 5,7%).
En Zúrich, los principales escaladores del pelotón tendrán un trazado más adecuado a sus habilidades, después de varios años en los que los Mundiales favorecían a ciclistas con diferentes perfiles. Este domingo, la carrera élite masculina contará con 274 kilómetros y 4.500 metros de desnivel acumulado, lo que confirma este desafío.
El duelo Pogacar Evenepoel
¿Por qué es el duelo más esperado? Pues porque nunca se ha producido en estas circunstancias en las que están los dos corredores. De un lado, Tadej, obsesionado con el Campeonato del Mundo. A ver, no tiene prisa, tiene 26 años, pero aún no teniendo prisa, sabe que las oportunidades en un mundial escasean, porque no siempre en los mundiales se da un recorrido lo suficientemente exigente como para que un corredor de sus características pueda imponer su enorme potencia a los demás.
Sabe que esta oportunidad de Suiza no se va a repetir fácilmente. Además, sabe que está en un momento de su carrera deportiva en lo más alto, donde sin lugar a dudas parte como gran favorito y donde ha firmado ya resultados excepcionales que no es necesario recordar. Si acaso, las 85 victorias totales en su palmarés de un corredor de 26 años. Y, sobre todo, los 22 triunfos parciales que ha firmado esta temporada son números estratosféricos que hablan no solo de la condición, sino especialmente de la ambición del corredor esloveno.
Quiere ganar el mundial sí o sí, y tiene que ser este año. No significa que no lo vaya a poder hacer en un futuro, pero más vale pájaro en mano que ciento volando.
Sabe que este circuito de Zúrich es lo suficientemente exigente, y sabe que su condición física, lo demostró el otro día ganando en Montreal, es fantástica. Porque podía haber alguna duda por ahí, en el sentido de que Pogačar dejó de correr después del Tour de Francia y no había vuelto a competir, ni siquiera en los Juegos Olímpicos. Pero, ha aparecido ahí en Canadá, y ya sabemos: hoy no se viene a entrenar, hoy no se viene a buscar la puesta a punto. Esa se busca en las concentraciones en altitud; hoy se viene a ganar.
Tadeo estuvo en el top 10 del Gran Premio de Quebec y ganó con una autoridad insultante, como casi siempre, en el Gran Premio de Montreal. O sea, ninguna duda en torno al esloveno,
La única duda que nos puede plantear quizá es un pequeño déficit en el equipo, comparado con Bélgica o con el resto de algunos otros países. La ausencia de última hora de Matej Mohorič, que sufrió una caída observando y viendo, controlando una prueba de gravel en la que quiere estar otra vez a repetir título, y desafortunadamente para él, no va a poder correr este mundial, digo, de fondo en carretera del domingo.
Es una baja sensible, porque los eslovenos no andan sobrados de corredores. También es cierto que alguien dirá: hombre, por contra, tiene un ciclista como Primož Roglič.
Un poco lo contrario de lo que ocurre con Bélgica, donde Remco Evenepoel va a ser el líder indiscutible de la formación. Remco ya ha sido campeón del mundo, así que por ahí tampoco es que le urja de esa manera, y viene además de cosechar medallas de oro y títulos: el doble título en los Juegos Olímpicos, el título de ruta en contrarreloj del pasado domingo aquí en Zúrich. Y no digo que esté sobrado, porque todos quieren más y más.
También la trayectoria de Remco Evenepoel, con ese arsenal de victorias, es impresionante. Con 24 años, suma ya 59 triunfos, nueve logrados esta temporada, donde se ha dejado ver y ha exhibido un potencial extraordinario que hubiera crecido posiblemente de no ser por aquella caída también en abril.
Y sobre todo, de haber centrado o focalizado la temporada en la segunda parte: el Tour de Francia, donde tuvo un tercer puesto fantástico, los Juegos Olímpicos, el Mundial de contrarreloj. Ahora el Mundial de ruta le espera.
En fin, un equipo que sí va a estar en su servicio, un equipo con mucha experiencia, un equipo muy adaptado y muy dado a pelear por este tipo de carreras de un día. Y donde también puede sobresalir la figura del joven Van Heils. Yo le situaría como uno de los favoritos para pelear por las medallas, pero entiendo que el joven corredor del equipo Lotto va a estar en la ayuda fundamental de Remco Evenepoel. Otra cosa es que la carrera se ponga en situación favorable y no lo vaya a desperdiciar. Pero más solidez, insisto, en el equipo de la selección belga que en la selección eslovena.
Invitados de lujo a la disputa
Diría lo mismo, sin tirar las campanas al vuelo, de Mathieu van der Poel. Porque, a ver, si presento el duelo entre Pogačar y Evenepoel es porque es un duelo muy esperado. Es porque es un duelo entre dos corredores de muy parecidas características, que son capaces de rendir a altísimo nivel en una vuelta por etapas y de rendir a un nivel fantástico en estas pruebas de un día de especial dureza y desnivel.
Tengo la sensación de que el circuito sí se adapta perfectamente a un corredor como Van der Poel. No son colinas tan exigentes, no son desniveles pronunciados largos. Son carreras que se parecen bastante a la Lieja-Bastoña-Lieja o al propio Lombardía, más, a mi modo de ver. Pero es verdad que una carrera de 274 km supone un esfuerzo, una exigencia acumulada, que tal vez a un tipo de corredor que no es escalador le pueda terminar pasando factura.
Está por ver, porque también cuesta mucho pensar que a Van der Poel le pase factura una carrera de estas características. Pero es verdad que cuando nos dijeron aquello de que, a ver, son 4500 metros de desnivel, automáticamente descartamos a corredores como Van der Poel o como Wout van Aert. Pero luego, viendo el circuito, viendo las exigencias de la carrera, a mí me parece que está perfectamente al alcance de Mathieu van der Poel repetir victoria.
A su favor, es más rápido, mucho más rápido que Evenepoel y más rápido que Pogačar. Cuenta con un equipo también con el oficio necesario como para rendir bien en este recorrido, y, sobre todo, ahí sí que no hay ninguna duda para que todos, si son nueve, porque al ser campeón del mundo el equipo corre con el campeón y los ocho de las formaciones, pues todavía será más poderoso.
Así que, a mí, a la hora de situar a favoritos, es evidente que me voy a decantar por Pogačar. Pero la cabeza me dice que pueden ocurrir otro tipo de cosas. Y que, si Pogačar no es capaz de soltar en esas colinas a Van der Poel, Van der Poel le puede ganar a Pogačar en la línea de meta.
Son extrañas circunstancias que pueden darse o no, conjeturas sobre las que estamos hablando, porque no es descabellado que lleguen de uno en uno. Pogačar puede soltar a cualquiera en cualquier tachuela mínimamente exigente, pero a lo mejor en el recuerdo de todos está lo del ascenso del Poggio, donde, por más intentonas que hizo Pogačar, no logró soltar al propio Van der Poel.
También hay que tener en cuenta a otros corredores que pueden dar la sorpresa. Por ejemplo, un corredor como Julian Alaphilippe, quien, aunque ha tenido un año más complicado, es un experto en carreras de un día y tiene la experiencia y el talento necesarios para estar en la pelea. Asimismo, corredores como Mads Pedersen y Alexander Kristoff también deben ser considerados, ya que cuentan con la velocidad y resistencia para competir en un final explosivo.
El papel del equipo será crucial, sobre todo para los ciclistas que dependen de sus compañeros para protegerse y llevarlos a la posición ideal en los momentos decisivos. Equipos como el de Bélgica, que cuenta con una sólida formación de apoyo para Evenepoel, o el de Dinamarca, que tiene a Pedersen y otros buenos gregarios, podrían marcar la diferencia.
Qué podemos esperar de España
El equipo español incluye a Carlos Rodríguez, Enric Mas, Ayuso, Landa, Aranburu, Pello Bilbao,Roger Adriá y Pablo Castrillo.
Me da la sensación que es un equipo muy equilibrado. Encontramos mezclados ciclistas más veteranos como Enric, Mikel o Pello con ciclistas jóvenes. Para algunos esta es su primera aparición en una competición así, como puede ser el caso de Roger o de Pablo Castillo, que tras su fenomenal Vuelta a España se ha ganado un puesto en la selección final. Ahora bien, los contendientes españoles podríamos decir que son 3: Carlos, Enric y Ayuso.
Carlos Rodríguez afronta su segundo Campeonato del Mundo con más experiencia y mejor preparación tras su participación en 2021. Ha seguido un plan de recuperación tras La Vuelta a España, buscando llegar en óptimas condiciones. El propio ciclista destaca el buen ambiente en la concentración con la selección española en Alsacia y confía en el equipo, aunque preferiría un recorrido con subidas más largas.
Enric Mas, con buenas piernas tras La Vuelta, también tiene grandes expectativas para su tercer Mundial. Juan Ayuso debutará en esta cita, sintiéndose cómodo con el recorrido y listo para enfrentar los más de 270 km.
En fin, la lucha por este Mundial es entre los mismos que se disputan el Tour o cualquier otra gran vuelta, pero en vez de tener 3 semanas para preparar el terreno tendrán que demostrar todo lo que puedan en un solo día. El que mejor juegue sus cartas se hará con el maillot arcoíris tan ansiado.
FAQs
Peter Sagan, ciclista eslovaco, es conocido por haber ganado el Campeonato Mundial de Ciclismo en Ruta en tres ocasiones consecutivas (2015, 2016 y 2017). Este logro lo convierte en uno de los ciclistas más exitosos en la historia de los mundiales.
Eddy Merckx, conocido como uno de los mejores ciclistas de la historia, ha ganado tres títulos mundiales de ciclismo en ruta (1967, 1971 y 1974). Otros ciclistas destacados con tres victorias incluyen a Peter Sagan, Alfredo Binda y Óscar Freire.
El Campeonato Mundial de Ciclismo en Ruta se celebra anualmente, generalmente en septiembre. Este evento reúne a los mejores ciclistas del mundo para competir por el codiciado maillot arcoíris en pruebas de ruta y contrarreloj.
Los Mundiales de Ciclismo en Ruta cuentan con diversas categorías para diferentes grupos de edad y géneros. Las principales son: Élite masculina, Élite femenina, Sub-23 masculina, Junior masculina y femenina. Cada categoría tiene pruebas de ruta y contrarreloj.