Skip to content

Bolsa de hielo para recuperar la musculatura

El ciclismo es un deporte que consiste simplemente en pedalear rápido e ir acumulando kilómetros de rodaje. Cuantos más kilómetros en menos tiempo, mejor. Esta motivación principal hace que los ciclistas tengan que exprimir su cuerpo al máximo, llegando a dañarlo muscularmente. Por tanto, una parte fundamental del entreno del día a día del aficionado al ciclismo es la recuperación del esfuerzo. 

Y aquí es donde entran en juego herramientas sencillas como la bolsa de hielo para ciclistas cobran una gran importancia. Ya sea en formato reutilizable, en gel o instantáneo, el frío aplicado en zonas localizadas se ha convertido en un recurso clave para reducir la inflamación y aliviar el dolor después de cada entrenamiento.

Diferentes tipos de bolsa de hielo

Índice

Beneficios de usar la bolsa de hielo tras el entreno

Utilizar la bolsa de hielo después de un esfuerzo físico tiene un objetivo muy claro: acelerar la regeneración de tejidos. El frío ayuda a disminuir la inflamación, reduce el flujo sanguíneo y alivia el dolor de sobrecargas y golpes. En el ciclismo, un deporte donde la fatiga física es lo más habitual, estas terapias son una alternativa económica y fácil de aplicar en casa y sencillas para mantener el tono muscular en condiciones óptimas.

Los ciclistas profesionales son los primeros en aprovechar estas bolsas de hielo para lesiones con piscinas de hielo o crioterapia después de carreras exigentes. Diversos estudios de fisiología también avalan la utilidad de estas técnicas, asegurando que la aplicación de frío reduce la fatiga muscular hasta en un 25%. Para los que no somos profesionales, la alternativa más práctica siguen siendo las bolsas de hielo reutilizable o de gel.

  • MATERIALES DE ALTA CALIDAD — Nuestras bolsas de hielo están hechas de materiales de poliéster de alta calidad, con una …
  • FÁCIL DE USAR COMO TERAPIA DE FRÍO Y CALOR — Para la terapia de frío, simplemente llene dos tercios de la bolsa de hiel…

Cuando usar gel de hielo después de entrenar en bici

El momento de usar el gel de hielo es clave. Lo más recomendable es aplicar frío justo después de terminar el entrenamiento o competición, cuando el músculo todavía está inflamado. Cada zona debe exponerse al frío durante 15 o 20 minutos como máximo, para evitar que la sobreexposición dañe la piel. Si el entrenamiento ha sido de alta intensidad o te sientes muy cargado, puedes usar hielo dos veces al día: después del entreno y antes de ir a dormir.

No es obligatorio usar el hielo en bolsa después de cada salida en bici, pero es muy recomendable tras sesiones de alta intensidad, competiciones o recorridos con mucho desnivel. En casos de caídas o golpes, una bolsa de hielo instantáneo puede mejorar la inflamación al instante, sin tener que esperar a llegar a casa. 

chica aplicando frío con una bolsa de hielo en el hombro

Mi experiencia al usar hielo tras entrenar

Llevo tiempo utilizando bolsas de hielo varios meses cada vez que me siento un poco más cargado de la cuenta, y la verdad es que la diferencia se nota. Al día siguiente del entreno noto como la fatiga muscular e inflamación es menor a cuando no aplico hielo. Como yo suelo salir día sí, día no, cuando llega el día de volver a salir, ya tengo las piernas mucho más recuperadas. Además, es muy fácil de hacer: solo necesitas tu bolsa de hielo y unos minutos de dedicación.

Eso sí, hay que ser muy constante. Tener en mente que tienes que aplicarlo y bloquear momentos específicos durante el día puede, a veces, resultar complicado. Pero una vez integrado en la rutina de entrenamiento, los beneficios superan con creces los pequeños contratiempos de tiempo.

Opiniones de compradores

Rodrigo Saez

★★★★★

Lo mejor de todo son los tres tamaños que ofrecen porque los puedes adecuar mejor a la zona afectada. De momento los he probado con hielo y si es cierto que el tamaño pequeño caló un poco pero tras secarlo no fue a más. Merecen la pena por calidad-precio.

Juliana Guerrero

★★★★★

Tengo uno de una sola medida, y encontré estos que parece una pasada porque son tres tamaños; a veces no se necesitan tan grandes ni tan pequeños.

Richinhe

★★★★★

Son exactamente lo que aparece en la descripción y fotografías, y cumplen con su función. No se puede pedir más.

Carecoco

★★★★

Las bolsas de hielo cumplen su función. Resto una estrella porque bajo mi punto de vista la calidad de los materiales puede ser mejor.

La utilidad real de las bolsas de hielo para ciclistas

Integrar el uso de bolsas de hielo para deportistas es una estrategia sencilla y económica que no mejora directamente tu rendimiento, pero sí que reduce las incomodidades tras los entrenos. Al reducir la inflamación y el dolor, puedes salir a rodar con más frecuencia habiéndote recuperado de la anterior salida. De esta manera, tu progresión como ciclista será más constante.

Existen varios tipos de bolsas de hielo que se adaptan a tus necesidades:

  • Reutilizables: puedes mantenerla en el congelador y usarla múltiples veces.
  • De gel: son flexibles y se adaptan al cuerpo para mantener mejor el frío.
  • Instantánea: se activa al romper su interior y son muy útiles cuando estás fuera de casa. 

Todos estos tipos de hielo son productos accesibles en cualquier farmacia o supermercado. La facilidad de compra hace que tener una bolsa de hielo sea un complemento indispensable y una inversión mínima para los beneficios que aporta. 

Dónde aplicar frío como ciclista

Rodillas

Muy expuestas a sobrecargas y una de las localizaciones más comunes para aplicar una bolsa de hielo para rodilla.

Gemelos y cuádriceps

Favorece la recuperación tras esfuerzos en montaña o entrenamientos de series.

Zona lumbar

Útil cuando hay molestias derivadas de posturas prolongadas sobre la bicicleta.

Se debe aplicar el frío de forma localizada en las zonas necesarias, evitando abusar del hielo indiscriminadamente en todo el cuerpo.

Evita estos fallos al usar bolsas de hielo

El error más común es aplicar frío directamente sobre la piel, lo que puede causar quemaduras. Aplicar hielo durante más de 30 minutos también es peligroso; aunque parezca que cuanto más tiempo mejor, a veces el efecto puede ser el contrario. Un claro indicador de que algo está mal es si sientes hormigueo intenso, palidez excesiva o dolor punzante, son señales de que hay que retirar el hielo inmediatamente. 

También es común abusar del frío, aplicándolo a diario sin necesidad. El hielo debe aplicarse en situaciones de esfuerzos intensos, lesiones o inflamaciones. Tampoco es bueno confiar únicamente en el gel de hielo, el descanso, la hidratación y una buena nutrición son clave para mantenerte en buena forma.

Otra manera de recuperar físicamente

Lee el artículo completo sobre la pistola de masajes AERLANG: aquí

FAQs

Se recomienda aplicar la bolsa de hielo entre 15 y 20 minutos por sesión, con descansos antes de repetir. Exceder este tiempo puede causar daños en la piel y tejidos subyacentes.

Las bolsas de hielo reutilizables son ideales para usar en casa o en entrenamientos regulares, mientras que las instantáneas son perfectas para emergencias durante salidas. La elección depende de la situación y necesidad del ciclista.

Se pueden adquirir en farmacias, supermercados o tiendas online como Amazon. Los precios suelen ser muy accesibles, y algunas incluso vienen diseñadas específicamente para uso deportivo.

No, siempre se debe interponer una tela fina entre la piel y la bolsa de hielo para evitar quemaduras por frío. Aplicarla directamente puede dañar la piel y tejidos subyacentes.

Otros consejos para mejorar encima de la bicicleta:

Banner-codigo_1000x600
¡Haz clic para puntuar esta entrada!
(Votos: 0 Promedio: 0)
Raúl Prada

Este contenido ha sido escrito por Raúl Prada, ciclista habitual de MTB y carretera desde hace más de 10 años. Las pruebas y análisis reflejan experiencias reales con este material en rutas o estudios profundos realizados con criterio estricto.

Configurar cookies